La décimo cuarta versión del seminario «¿Cómo se viene la temporada?», organizado por la Sociedad Nacional de Agricultura (SNA), es lo que se está llevando a cabo esta mañana, en la que el presidente del Gremio, Ricardo Ariztía, abrió el evento dando cuenta de la preocupación del sector por los hechos de violencia que han ocurrido en los últimos días en la Región de La Araucanía.
Si bien expuso la atención de la industria en temas como la pandemia, la sequía o la discusión en torno a la reforma al Código de Aguas, aseguró que «más allá de esos temas, hay uno que nos preocupa sobremanera: la situación en La Araucanía y otras regiones del sur, donde la violencia es creciendo y cada vez más organizada».
«En lo que va del año, han sido quemados centenas de camiones, escuelas, helicópteros de control de incendios, iglesias, casas, bodegas, siembras, robo de ganado, de madera intento de destruir viaducto del malleco. Y lo más grave, acaban de herir gravemente a una niña de tan solo 9 años. Detrás de esas cifras hay personas, hay sueños y proyectos truncados», recalcó.
Por eso, Ariztía subrayó que «Chile debe garantizar que todos sus habitantes vivan en un Estado de Derecho. En esto, los tres poderes del Estado tienen la responsabilidad de converger en acciones que impidan que un pequeño grupo de extremistas y delincuentes, amparándose en una falsa causa mapuche, infundan miedo y perpetúen el rezago de La Araucanía. Por décadas hemos hecho diagnósticos en torno a este tema. ¡Hoy es hora de ir a la acción! ¡Es hora de concretar las soluciones!».
En esa línea, expuso que la SNA, ha estado en coordinación con «las más altas autoridades del país», como el Presidente de la República, el ministro del Interior y el presidente de la Corte Suprema, además del Director de la PDI, «con quien acordamos la puesta en marcha de un plan piloto para combatir la delincuencia rural en la Región de O´Higgins, y quedamos al tanto de cómo está trabajando la institución en La Araucanía», dijo, destacando la labor de la PDI y Carabineros.
Sin embargo, «sus esfuerzos no sirven si la aplicación de la justicia falla, o no contamos con leyes adecuadas», afirmó Ariztía. «Pero junto con perseguir a los violentistas y entregar las herramientas legales para hacerlo con efectividad, es necesario responder a las demandas correctas del pueblo mapuche que nada tiene que ver con quienes se aprovechan de éstas para legitimar sus actos delictuales», agregó.
Así, «pensando en las víctimas», sostuvo que «queremos trabajar con el Estado un sistema objetivo de indemnización que se haga realidad. Estamos dispuestos como sector privado a contribuir y entregar alternativas. Como SNA, en conjunto con el CAS, hemos acordado crear un fondo que vaya en ayuda de estas víctimas inocentes, para lo cual ya hemos dispuesto un monto inicial de $50 millones, que será administrado por agricultores y lonkos destacados».
«Los agricultores debemos tener un rol más activo en la construcción de un mejor país», manifestó Ariztía, por lo que «en los próximos días nos trasladaremos a La Araucanía.
El presidente de la CPC, Juan Sutil, nos acompañará para iniciar una ronda de conversaciones con lonkos y buscar acuerdos en que como sector privado podamos contribuir a restablecer las confianzas dañadas».
«Respecto de la discrepancia que hay en torno a los terrenos agrícolas, proponemos, realizar un catastro de tierras ordenado y consensuado. Que defina y delimite, y coloque un punto final. Asimismo, el Estado debiera centrar en una sola entidad las ayudas e iniciativas que tiene dispersas en diferentes instituciones», acotó.
Y concluyó: ¡Aislemos a los violentistas, persigámoslos y que cumplan sus condenas! ¡No aceptemos que se vistan del falso ropaje de la causa mapuche que no les pertenece! ¡Compensemos a las víctimas de la violencia del daño que nuestro Estado de Derecho no ha sido capaz de evitar! ¡Recuperemos la confianza del pueblo mapuche y empecemos a concretar las promesas! ¡Los habitantes de nuestro país y en particular de nuestra zona sur así lo exigen!».
Fuente: Emol
