La fiesta clandestina registrada en un domicilio de Cachagua, en la comuna de Zapallar, donde según muestran las imágenes, decenas de personas bailan sin distanciamiento social ni elementos de protección alguno, sigue generando la activación de procesos judiciales por no respetar la norma sanitaria vigente ante la pandemia de coronavirus que afecta al país.
Esto porque la Fiscalía de Valparaíso anunció la apertura de una investigación criminal que busca identificar a los organizadores y a quienes participaron de la celebración.
La situación alertó a las autoridades y con este nuevo proceso se busca dar sanción a quienes formaron parte de esta fiesta, que se habría realizado la noche de Año Nuevo.
¿Qué dijo el fiscal?
El tema fue explicado por el fiscal de la zona Luis Cortez, quien indicó los pasos a seguir en materia judicial para determinar posibles sanciones.
«Ante la denuncia efectuada en relación a esta fiesta realizada en la localidad de Cachagua, se ha abierto una investigación criminal y la Fiscalía ha coordinado con la brigada del medio ambiente una serie de diligencias», comenzó explicando el jurista.
«Se busca determinar a las personas que infringiendo la normativa sanitaria dispuesta por la autoridad, a propósito de la pandemia de Covid-19, habrían organizado y también participando en esta actividad. Además, se busca evaluar cuáles son las consecuencias a la salud pública», expresó el fiscal.
Así ya se revisan los audios de WhatsApp y las imágenes divulgadas en redes sociales, donde se conoció y confirmó la participación de dos hijos de la diputada Ximena Ossandón.
Esta diligencia judicial se suma a la querella presentada por el Gobierno y que fue abordada por el intendente regional de Valparaíso, Jorge Martínez, quien sostuvo que la acción judicial apunta a “los participantes en estas fiestas, contra eventualmente su padres, por las responsabilidades que les puedan caber, y también contra los organizadores”.
