Presidente SAGO A.G.: Osorno, la ciudad predestinada

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Tenemos el deber de hacer un alto y volver a unirnos en torno a una visión de grandeza que sea no sólo motivo de orgullo sino de mejores oportunidades para todos

«Osorno es una ciudad predestinada. Su provincia también lo es. Desde su nacimiento estuvo señalada para imponerse a los azares del destino y para triunfar sobre los obstáculos», señalaba el inicio del reportaje central de la revista Zigzag del mes de marzo de 1958, con motivo del Cuarto Centenario de la fundación de nuestra capital provincial.

La elogiosa nota definió a Osorno como «el motor de la zona sur», «una zona que favoreció la naturaleza y que los hombres ayudaron”, y también destacó generosamente a su gente, al señalar que es «una región donde el civismo sirve de lección». Debe haber sido gratificante para los habitantes de nuestra ciudad observar que la constatación de esa revista de circulación nacional, era coincidente con la visión que cuatro siglos antes había entregado el gobernador de Chile, García Hurtado de Mendoza y Manrique: “Osorno, con el favor de nuestro Señor, será una de las mejores de Chile”.

El peso de esta historia nos podría llevar a una mirada autoflagelante de nuestro presente que se sintentiza en sentir que no somos merecedores del legado de nuestros antepasados. Sin embargo, en este nuevo aniversario de Osorno, queremos entregar un mensaje de esperanza y optimismo respecto de lo que hemos sido, somos y seremos. Tenemos plena conciencia de que nuestra historia avanza al ritmo del motor productivo que ya el 13 de enero de 1796, Ambrosio O´Higgins fijó como el alma de esta ciudad, al no permitir el cateo de minas y lavaderos de oro, plata y cobre, ya que las verdaderas riquezas debían encontrarlas en «la agricultura y la crianza de ganado».

De una zona que fue responsable de la alimentación del sur, pasamos a ser vitales en el suministro de alimentos de calidad para todo Chile y hoy, para el mundo entero, con una variedad de productos que van desde la leche a la carne, pasando por arándanos, cerezos y avellanos, hasta granos que se incorporan a la dieta de los salmones y una serie de verduras que son el corazón de ferias libres y que, por qué no, podrán salir también de nuestras fronteras nacionales, en un futuro cercano.

Somos una ciudad en un permanente proceso de integración y en este aniversario 463, a las puertas de elecciones, en medio de una Pandemia que no nos da tregua, tenemos el deber de hacer un alto y volver a unirnos en torno a una visión de grandeza que sea no sólo motivo de orgullo, sino de mejores oportunidades para todos.

Christian Arntz Mac-Evoy
Presidente de la Sociedad Agrícola y Ganadera de Osorno, SAGO A.G