Fiscalía pidió prisión preventiva para el ex director de la PDI

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Este jueves continuó, en el Séptimo Juzgado de Garantía de Santiago, la formalización del exdirector general de la Policía de Investigaciones (PDI), Héctor Espinosa, por los delitos de malversación de caudales públicos, falsificación de instrumentos públicos y lavado de activos.

Producto de dichas acusaciones, el Ministerio Público pidió prisión preventiva contra el extimonel de la PDI, quien es acusado por la presunta apropiación indebida de $146 millones destinados a gastos reservados.

También son imputados la esposa de Espinosa, María Magdalena Neira Cabrera, y el sindicado como mano derecha del otrora jefe de la PDI, el exsubcomisario Eduardo Villablanca, ambos por lavado de activos. Además, a este último se le acusa como cómplice del desvío de las arcas fiscales.

La audiencia continuará este viernes, a las 9 horas, donde se espera conocer las medidas cautelares contra los involucrados.

La investigación surgió después de que la Unidad de Análisis Financiero (UAF) recibiera un Reporte de Operación Sospechosa del banco de Neira Cabrera por la adquisición de un departamento en Las Condes, donde se pagaron $250 millones al contado con vales vistas.

Según detalló la fiscal Karina Guajardo, la UAF fue alertada por irregularidades en las cuentas de Espinosa y Neira, quien era funcionaria del Servicio de Impuestos Internos.

“Operaciones carentes de justificación registradas en sus cuentas bancarias personales con altos niveles de abonos que no se condicen con sus perfiles comerciales y además de un uso intensivo de dinero en efectivo”, detalló Guajardo.

El fiscal de Magallanes, Eugenio Campos, detalló que tras la pesquisa se determinó que “entre los años 2015 y 2017, en dependencias del edificio institucional ubicado en General Mackenna 1370 de la comuna de Santiago, el referido director general de la PDI, sustrajo ingentes montos de dinero en moneda nacional proveniente de recursos públicos destinados a la satisfacción de gastos reservados y asignados a dicha institución”.

“Durante el periodo investigado, el imputado sustrajo al menos 146 millones de pesos aproximadamente. Dichos dineros provienen de fondos públicos destinados a la satisfacción de los gastos reservados que se reciben en la Policía de Investigaciones, y que el imputado tenía en razón de su cargo”, agregó el persecutor. En el desglose, 109 millones fueron depositados a cuentas del exdirector y 37 millones a las de su pareja.

Respecto a Villablanca, la Fiscalía lo apunta como el encargado de recibir el dinero para luego depositarlo en las cuentas corrientes de Espinosa y su cónyuge.

El exsuboficial, quien tenía una oficina con conexión directa al despacho de su superior, confesó que “en diversas oportunidades a solicitud del señor Espinosa, que en realidad yo consideraba una orden, me correspondió hacer depósitos en efectivo en su cuenta del Banco Estado y del Banco de Chile en el caso de su cónyuge”.