Durante la tarde de este miércoles, la diputada Jenny Álvarez, del Partido Socialista, rompió el silencio, pero no fue para referirse a los problemas de transporte marítimo de la isla de Chiloé, tampoco fue para referirse a la brecha existente en electrificación rural de las islas del archipiélago o la situación actual del puente Chacao que hoy genera la preocupación de los alcaldes chilotes, mucho menos, para abordar la iniciativa Chiloé Región, sino que para referirse a las críticas en su contra luego de que se diera a conocer que no se encontraba vacunada contra el COVID-19.
Cabe recordar que días atrás trascendió que la parlamentaria se contagió de esta misma enfermedad, obligando a una cuarentena preventiva a toda la bancada del partido socialista durante la semana pasada.
En ese marco, la diputada Álvarez indicó que decidió no vacunarse, al igual que miles de personas más, debido a que no confía en la vacuna.
La parlamentaria añadió que el Senado estuvo prácticamente cerrado de todos los contagios, y según la presidenta, ahí están todos con vacunas, con las tres dosis, puntualizando que “Entonces aquí algo está pasando”.
Ello a raíz de las declaraciones de la presidenta del Senado, Ximena Rincón (DC) quien, luego que se conociera que Álvarez no se encontraba vacunada indicó que «la información que tenemos hasta hoy es que están todas y todos vacunados»
Finalmente, ante los dichos que la calificaban como antivacunas, la diputada del PS aseguró que «yo no soy antivacunas, porque todos lo están diciendo y yo tengo todas las vacunas, hace poco me he puesto un par que me faltaban, entonces se han dicho muchas mentiras».
