Luego que en octubre del 2015, saliera a la luz pública el video en redes sociales donde el Papa Francisco efectuó una defensa del Obispo de Osorno, Juan Barros, descartando su rol de encubridor en el caso Karadima, la Corte Suprema solicitó -por medio de un exhorto- la entrega de los respectivos antecedentes, sin embargo, El Vaticano rechazó entregarlos.
Desde la Organización de Laicos de Osorno, catalogan la negativa de El Vaticano como “grave”, toda vez que se ofende al sistema judicial chileno, al tiempo que instala la idea de encubrimiento por parte de la Iglesia Católica.
De igual forma, Juan Carlos Cruz, víctima del caso Karadima, acusa abiertamente de encubridora a la Iglesia, institución que –a su juicio- cuenta con un doble estándar en la esfera moral.
La Corte Suprema solicitó los antecedentes en el marco de la causa contra el Arzobispado, iniciada en 2013 con la demanda interpuesta por James Hamilton, José Andrés Murillo y Juan Carlos Cruz, quienes solicitan a la Iglesia pedir perdón públicamente a quienes sufrieron abusos, además de una indemnización económica de 450 millones de pesos.