Tras la intoxicación de una familia que consumió mariscos contaminados con veneno paralizante en el sector de Quihua en Calbuco, y que cobró la vida de un menor de tres años, la situación generó la preocupación inmediata de los recolectores de orilla, comerciantes y pescadores de la comuna de las aguas azules ante el impacto que podría generar dicho episodio.
La situación derivó en una Mesa Intersectorial de Emergencia por Marea Roja, donde las autoridades regionales anunciaron un aumento en las fiscalizaciones y testeos.
En ese marco los recolectores de orilla se mostraron preocupados por la afectación en la actividad, pero también por los controles que realiza la autoridad.
Igualmente los comerciantes, dueños de cocinerías y locales que trabajan en la venta de productos del mar recalcaron que la venta de mariscos en uno de los principales ingresos que tiene dicha comuna.
Por su parte, José Alvarez dirigente de los pescadores locales denunciaron que de momento los funcionarios encargados de la fiscalización y testeos de los productos, no han querido sacar las muestreos correspondientes para determinar el estado de sus mariscos.
Radio Sago realiza las gestiones para obtener una declaración de la Seremi de Salud o los organismos competentes en torno a la denuncia que realizan los hombres de mar, y que según dicen los tienen a esta hora con la incertidumbre y los brazos cruzados, en medio del compromiso de las autoridades sectoriales de aumentar las fiscalizaciones y los testeos.