La coalición opositora Chile Vamos pidió al Ministerio del Interior que remueva a Luis Eduardo Thayer, director del Servicio Nacional de Migraciones, a quien ayer la Corte de Apelaciones de Concepción sancionó con una suspensión temporal de 10 días en su cargo debido a que la repartición incumplió un plazo para responder a un recurso de protección por la tramitación de una visa temporal.
Tras conocerse la resolución, que aún debe ser vista por la Corte Suprema, la bancada de Renovación Nacional ofició a la ministra Izkia Siches para solicitarle la salida de Thayer, planteando que, además de este caso, el foco que ha puesto en su gestión ha empeorado la crisis migratoria.
«El director de Migraciones ha insistido en priorizar una agenda de fronteras abierta sin ningún tipo de control, por sobre la seguridad de los chilenos, profundizando aún más la crisis migratoria, lo que hace absolutamente insostenible que siga dirigiendo el Servicio», reprochó duramente Andrés Longton, líder de los diputados de RN.
Según dijo el legislador, «las fronteras de nuestro país están absolutamente desbordadas, ya han ingresado más de 30 mil migrantes de manera clandestina en lo que va de este Gobierno, en el que no se ha realizado casi ninguna expulsión administrativa -han sido cuatro y todas autogestionadas por los propios migrantes-; y por si fuera poco, quiere aplicar un perdonazo a migrantes irregulares, para que se queden de manera permanente en Chile».
En esa línea, el diputado UDI Juan Antonio Coloma cuestionó que la suspensión se debe a «su incapacidad de responder cuatro oficios en una causa de un recurso de protección de una ciudadana cubana».
«Cuando el Servicio Nacional de Migraciones no es capaz de hacer su pega, nos enfrentamos a que hay impunidad», agregó.
«LA CAPACIDAD DE RESPUESTA ES UN PROBLEMA ESTRUCTURAL»
Desde el oficialismo, en tanto, consideran que en este caso están pagando «justos por pecadores» pues el retraso en estas tramitaciones es una situación que se arrastra desde hace un tiempo.
«Lo que ha ocurrido naturalmente es una demostración más del colapso que está significando la inmigración irregular y cómo la institucionalidad no tiene capacidad de respuesta a tiempo. El número de recursos de protección que se están tramitando hacen factible este tipo de situaciones», sostuvo el diputado independiente Jaime Araya, de la bancada PPD.
Desde Migraciones han afirmado que, en el caso específico que motivó la suspensión, se trata de una ciudadana cubana que no vio afectados sus derechos y que, mientras solicitud se tramitaba, tuvo acceso a una autorización de trabajo y residencia provisorias.
Igualmente reconocieron el atraso, enmarcándolo un problema más profundo, pues hasta hace unos meses había 500 mil solicitudes pendientes, algunos con demoras de varios años, y sólo 13 abogados especializados para atender la demanda. A la vez, más de 8.000 recursos han sido ingresados en su contra por este motivo.
En esa línea habló Pablo Roessler, sociólogo y jefe de estudios del Servicio Jesuita a Migrantes.
«Lo que hemos ido analizando estos años, es que los plazos y capacidades de respuesta son problemas estructurales dentro de la gestión migratoria en Chile, que vienen arrastrándose desde hace años. Por ende, es importante poner el foco más en dar las soluciones a problemas estructurales. Si no los abordamos, dichas problemáticas van a seguir ocurriendo independiente de quien esté a cargo», expuso.
Desde la repartición dependiente de Interior afirmaron que Thayer cuenta con una subrogancia, por lo que no se paralizará la firma de los trámites pendientes aunque se ratifique la suspensión.
En paralelo, hoy trascendió que el abogado Antonio Henríquez, señalado como el responsable del retraso que llevó a la sanción contra Thayer, cuenta con un «historial de errores» que le habían valido su desvinculación en el Gobierno anterior, pese a lo cual fue recontratado en la Administración actual como jefe del area judicial del Servicio de Migraciones, según La Tercera. Desde la UDI piden su salida «por ineficiente».
Fuente: Cooperativa