Siempre se dice que los partidos se juegan en cancha y nunca fuera de ella. Y en el fútbol, las sorpresas, en ocasiones, son hechos concretos que a veces, destruyen los prejuicios y sesudos análisis previos. O sea, la estadística sirve, pero hasta por ahí no más.
Y claro, muchos pensaban que el partido con Iberia iba a ser un trámite. El estado actual de la institución, con una maraña de problemas admistrativos, podían ayudar a creer que afectaba a sus jugadores. Pero, eso no pasó.
Sumado los antecedentes anteriores y con un césped en cuestionable estado, Iberia pudo lavar heridas y venció a Provincial Osorno por uno a cero.
En la interna de los Toros sabían que un equipo herido, podía ser potencialmente peligroso. Aunque el trámite en el juego fue parejo, incluso pudo ser de otra forma, ya que Joaquín Romo estuvo a centímetros de anotar un golazo de media cancha, que fue despejado increíblemente por el portero local, Fernando Abarzúa.
Pero, el gran problema sin resolver para Osorno, fue la rara expulsión del goleador Diego Bielkiewicz, antes de los 20 minutos. El árbitro, Juan Comas, primero lo sancionó con roja directa por golpear al ex jugador taurino, Benjamín Povea. Sin embargo, después se retractó y a continuación, volvió a rectificar la roja. Baja sensible pues las expulsiones sin amarilla previa valen dos fechas de suspensión.
La única anotación del partido fue a los 65′, obra de Carlos Morales quien aprovechó un rebote desde la zaga lechera. De ahí en más y sin su goleador, Osorno no pudo hacer mucho más.
Dura derrota para los dirigidos por Diego Martínez, quienes bajan al quinto lugar de la tabla de Segunda División, con 4 partidos ganados, 4 perdidos y ningún empate. Su próximo duelo será ante General Velásquez, el martes 9 de mayo a las 15 horas, en el Parque Schott.