El robo de carne no es algo que solo preocupe a ganaderos, policías o a entes de seguridad pública, si no, también mantiene alerta a la Autoridad Sanitaria, toda vez, que carne sin examinar o cuyo tratamiento sea incorrecto puede generar graves afectaciones a la salud pública.
Andrea Bracho, encargada regional de alimentos de la Seremi de Salud Los Lagos, recomienda comprar productos cárnicos en locales establecidos, en razón, a los innumerables riesgos para la salud que pueden presentar las carnes en casos de faenamientos irregulares y el desconocimiento de enfermedades zoonóticas que puedan tener los animales.
Entre los síntomas más comunes al consumir carnes en mal estado o enfermas, se encuentran: fiebre, escalofríos, pérdida de apetito, sudores, debilidad, fatiga, dolor articular, muscular y de espalda, dolor de cabeza, entre otros.
En el caso, de la brucelosis, los reportes médicos y científicos señalan que los síntomas pueden desaparecer durante semanas o meses y después volver a aparecer. Algunas personas tienen brucelosis crónica y tienen síntomas durante años, incluso después del tratamiento, pudiendo generar endocarditis, que es la inflamación del revestimiento interno de las cavidades del corazón, artritis, espondilitis o sacroilitis, afectaciones a los huesos de la columna y la pelvis.