En época actual vertiginosa, donde los afectos y lealtades son cada vez más utilitarios y poco duraderos, aún existe el romanticismo en ciertas áreas, como por ejemplo, el Mercado Municipal de Osorno.
Fuente rica en historias, el aniversario número 70 del popular recinto de calle Errázuriz, también conlleva relatos de esfuerzo, nostalgia y emoción, como las lágrimas que brotaron de los sinceros ojos de Luis “Gato” Cárcamo, frutero de toda una vida en el sector.
Cárcamo dice que ahora el flujo de gente no es como antes, que en el viejo edificio del Mercado, la vida era más alegre y ahora, mucho más fría.
Más adentro del edificio, están las infaltables cocinerías. Colores, sabores y olores dignos de una mesa chilena, o mejor dicho, un “Rincón Chilote”, nombre que lleva el local de Juana Silva y Gastón Avendaño, matrimonio que ha construido su vida y obra, en este Mercado Municipal.
Gastón Avendaño, hombre de rostro afable, junto a Juana han podido sobrellevar incluso las adversidades del camino, donde la época de pandemia, fue una de las más duras.
Historias como las del Gato, de Juana y Gastón, se repiten en los diversos locatarios de este emblemático edificio, el cual durante estas jornadas realiza diversas actividades en el marco de su aniversario, donde la gente, sus clientes, están todos invitados.