Francisca Crovetto inscribió este domingo su nombre en la historia para el deporte chileno, luego de obtener la medalla de oro en la final del tiro skeet en los Juegos Olímpicos de París 2024.
Tras la ceremonia de premiación, la tiradora nacional habló con Chilevisión y manifestó su emoción tras colgarse la presea dorada. “Estoy demasiado feliz, es un sueño. El 2004 soñé con estar en unos Juegos Olímpicos, estos ya eran mis cuartos y los miedos de no volver a hacerlo bien, siempre estaban presentes”, inició.
“Trabajamos mucho para llegar a este día con todo mi equipo y mi familia. Lo más lindo del mundo es poder tenerlos a ellos en la tribuna, porque sin ellos habría sido imposible. También le envió un abrazo gigante a mis hermanas y a mi papá sobre todo, porque se lo prometí y acá está”, agregó al borde de las lágrimas.
En esa línea, la deportista del Team Chile señaló que: “Sabía que la competencia iba a ser dura y lo importante es que jamás me rendí. La última serie partí fallando el primer plato y siento que esa es mi gran fortaleza. Soy una luchadora, construyo cada competencia y entiendo que los ceros son parte del deporte”.
“No me sorprende el deporte. También en la final cuando fallé en los primeros dobles dije que todas fallan y pegan. He trabajo mucho mentalmente con mi marido, que es un fanático del deporte y ha estado conmigo esta semana. Los sueños se construyen, nada llegar por azar y ese es el mensaje para todo Chile”, complementó.
Por último, Francisca Crovetto señaló que: “No tengo palabras. Estoy viviendo el sueño de la Francisca de niña y de todo un país que creyó en mí, del Comité Olímpico, Ministerio, Federación. Son tantas las personas que me han ayudado desde las tías del CAR que me abren la puerta a las 7:30 de la mañana con una sonrisa hasta acá los voluntarios y mi familia”.
“Mi intención era siempre ir paso a paso, hacer una buena clasificación y entrar en las finales. Entrar en la final significaba estar dentro de las seis mejores y se logró con un shootout. Siempre tengo que sufrir y así fue. Esa convicción de que estoy preparada para todo, que nada me sorprende y no importa lo que pase. Uno tiene que entregarse a la experiencia con convicción y determinación. Gracias a todo mi equipo y todas las personas que han construido conmigo esta medalla”, sentenció.