Luego de emitida la suspensión en Chile del ingresos de carnes provenientes desde Brasil, a causa del caso de corrupción en el mercado y fiscalizaciones deficientes en frigoríficos con producción destinadas para el extranjero, entre los que se cuenta Chile, diversas reacciones han generado las medidas adoptadas por el gobierno para hacer frente a ésta situación.
Una de las principales medidas que la población ha tomado, es no comprar carnes de bovino, cerdo y pollo con origen brasileño, recomendación que el Senador Iván Moreira, reiteró a los consumidores, instándolos a preferir la calidad y seguridad que tienen los productos cárnicos, producidos en suelo nacional.
La crítica que realizó el senador, apunta a los organismos a cargo del resguardo sanitario de la población, como es el SAG y además da cuenta de la competencia desleal, que a su juicio existe, entre los productos de origen extranjero que se comercializan en Chile y los productores nacionales, que además están sometidos a rigurosas y constantes fiscalizaciones.
El Senador Moreira explicó que ésta situación debe marcar un precedente respecto a cómo actuar y reforzar las medidas de seguridad sanitarias para la población, lo que además debe ser reforzado con más personal calificado para fiscalizar los productos que ingresan al mercado nacional desde otras naciones.