Los supuestos temas pendientes del pasado amoroso del ejecutivo comercial osornino, Juan Carlos Monje Schultz, fueron los gatillantes de una de las peores etapas de su vida, en la que fue injustamente acusado por su ex pareja por delitos de agresión y violación.
Tras reaparecer en su vida, el hombre tuvo una relación de seis meses con una mujer de ocupación estilista en la ciudad de Osorno, la cual terminó en febrero del 2014 con un fuerte descontento por parte de la ex pareja, quien decidió demandarlo por los delitos ya mencionados.
En ese mismo año, la justicia acogió la demanda estimando la prisión preventiva de Monje, quien debió pasar ocho meses tras las rejas por un delito que más tarde se comprobaría que jamás cometió. Así lo detalla el afectado en su relato a Radio Sago, tras haber obtenido su libertad.
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Ante el adverso escenario que enfrentaba el hombre, padre de cuatro hijos y quien hasta antes del conflicto residía con su actual esposa, decidió escribir una carta a la Defensoría Nacional a fin de que se le asigne un abogado para la causa que investigue minuciosamente la causa.
Así fue que el abogado local, Cristian Rozas, abordó el caso, instancia en la que se logró establecer contradicciones en el relato de la mujer, así como también la inocencia del hasta entonces imputado.
Tras salir de la cárcel, Monje Schultz se refirió duramente en lo que respecta al proceder de la justicia en torno a esta causa.
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Hoy, respirando el fresco aire de la libertad, Juan Carlos Monje intenta rehacer su vida luchando contra el estigma que rodea a su persona a raíz de este motivo, por el cual no descarta emprender acciones legales por los daños morales y sicológicos de lo que dice fue objeto.
