Como una práctica que pensaban erradicada de la zona y ante el creciente trabajo de la población en relación a leyes de protección de los animales domésticos como de granja, representantes de las agrupaciones animalistas en el país, lamentan que aún un número considerable de personas tome parte de estos hechos y encubran un delito.
María Teresa Pinochet, consultora de agrupaciones animalistas, quien por años trabajó en Osorno y conoce la zona, indicó en conversación con radio Sago que resulta preocupante la cantidad de personas que se hacen parte en este tipo de delitos, ya sea como proveedor, espectador u organizador de peleas de gallos, «este es un negocio movido por ambiciones económicas», sostuvo.
La animalista destacó el trabajo investigativo que realizó la policía, para terminar con la detención de los responsables de estas peleas de gallos, un acto clandestino, así como también el aporte que la comunidad y población en general puede aportar para terminar de estas prácticas en todo el país.
Cabe recordar que los animales, de cualquier especie, en territorio nacional están protegidos bajo la Ley 20.380 que indica que cualquier persona que ejerza actos de crueldad contra los animales, se expone a sanciones, situación actual de los detenidos en el caso peleas de gallos detectada en la comuna de Río Negro.