Este lunes, y tras muchas incertidumbres, el Pontífice dio a conocer que aceptó la salida de los obispos Juan Barros, Cristián Caro y Gonzalo Duarte.
Esta información de inmediato generó una ola de reacciones, donde uno de los Movimientos que primero se manifestó fue el de los Laicos de Osorno, quienes celebraron y aplaudieron la acción, señalando en su mayoría, que pueden ver frutos de una »lucha pacífica» que llevaron por más de tres años contra Barros.
El vocero de los laicos, Juan Carlos Claret, comentó que si bien esto es bueno para el clero, dista de sentirse victoriosos, ya que con el transcurso del tiempo perdieron mucho. Sin embargo, confía en que ahora la tarea sea buscar la reconciliación y unión de los lazos rotos.
Por otro lado, Mario Vargas representante de dicho movimiento señaló que esta resistencia vivida por tres años finalmente dio frutos, donde destaca que siempre fueron con la verdad y no se dejaron aminorar ante la jerarquía de la Iglesia. Señalando que esta verdad naciente es un nuevo comienzo para Osorno que marca un precedente.
Cabe decir que los laicos, esperan con ansias la llegada de Monseñor Bertomeu y el obispo Scicluna este jueves a la ciudad, todo esto a modo de sellar estos años de pesar y lucha incesante.
