Preocupados al punto de llevar a cabo una manifestación en el frontis del Hospital Base San José de Osorno se encuentran los padres y apoderados de los niños que asisten a la escuela dispuesta al interior del recinto, la cual fue cerrada por término de contrato con la misma.
Y es que se trata de menores que, según señalan los angustiados padres, no son recibidos en otras escuelas debido a que cuentan con diversos trastornos de salud, tal como es el caso del hijo de 9 años de Paola Ortega, Presidenta del Centro de Padres y Apoderados de “La Escuelita”, como ellos prefieren llamarla.
Son 15 alumnos derivados por su médico tratante por medio de un certificado médico, y el cierre de la escuela, atendida por tres profesionales, es motivo de incertidumbre, según señala su Directora, Karina Döepking.
Niños hospitalizados, otros derivados por su médico tratante y una tercera modalidad, que responde a la atención domiciliaria, la cual en este recinto no se entrega, son las tres modalidades de atención en una escuela hospitalaria.
La respuesta entregada por el Hospital Base ante esta problemática radicó en el hecho de que las dependencias utilizadas para que opere la escuela, utiliza sectores inadecuados como por ejemplo, la Unidad de Cuidados Intensivos, donde los niños eventualmente podrían estar expuestos a variadas infecciones, lo que mantiene un incierto escenario para los niños y jóvenes que allí se desempeñan.
