Imagen: Archivo
Una sorpresiva decisión tomó la directiva de Osorno Básquetbol la tarde del martes 5 de febrero, en la previa a lo que sería el encuentro ante su similar de ABA Ancud, luego que -por medio de un comunicado- dieron a conocer que no se presentarían a dicho encuentro ni tampoco al del día 6 del mismo mes ante CD Castro, por motivos relativos a deudas de remuneraciones pendientes.
Textualmente, el comunicado señala “estamos profundamente apenados, asumimos la gestión del Club en marzo de 2018, salvando el descenso en los duelos definitorios, la carga financiera heredada fue era mayor que la que logramos gestionar. En este año los directores del Club hemos puesto dinero de nuestro propio patrimonio para salvar la situación, pero, ya no podemos más, sin apoyo decidido de la autoridad local (como ocurre con la mayoría de los clubes del sur) o de la empresa privada local, no se puede”.
La falta de apoyo -dan a entender desde la directiva- pone en riesgo la continuidad del básquetbol profesional en la ciudad de Osorno, procurando entregar mayores detalles de lo ocurrido con el club en el marco de esta determinación, dentro de los próximos días.