Acusando un presunto «tráfico de influencias», la Asociación de Funcionarios de la Autoridad Sanitaria, AFAS denunció que un alto funcionario de la Seremi de Salud habría agilizado trámites para alzar la prohibición de funcionamiento de un conocido restaurante de Puerto Varas.
A través de un comunicado público, la entidad indicó que el local IBIS, ubicado en la avenida Costanera de la ciudad lacustre, al ser fiscalizado el pasado 7 de febrero en el marco del programa de Alimentos de la autoridad sanitaria, presentó graves observaciones, entre ellas presencia de fecas de ratón, lo cual originó una Prohibición de Funcionamiento, de acuerdo al artículo 178 del Código Sanitario.
De hecho, el propietario del local fue citado para el próximo viernes 15 de febrero a las oficinas de la Seremi de Salud, para hacer sus respectivos descargos y constatar la corrección de las deficiencias sanitarias. Sin embargo, el local pudo ser reabierto apenas dos días después de la fiscalización por la que se le cerró.
Según la Asociación de Funcionarios de la Autoridad Sanitaria, existiría «información fundada» de la influencia directa de un alto funcionario de la Seremi de salud, que habría permitido “agilizar” los trámites, facilitando el alza de la prohibición de funcionamiento a este restaurant de Puerto Varas.
El comunicado de AFAS, afirma que las funciones que ejerce la Seremi de Salud son fundamentales para elevar los estándares de salud pública en los habitantes de la región de Los Lagos, que el programa de alimentos es un área técnica relevante para la institución, desarrollada por un grupo de funcionarios altamente competentes y comprometidos con su trabajo, por lo que el supuesto acto de «tráfico de influencias» que denuncian, y que califican como una señal negativa para la institución, les pone en alerta.
La entidad manifestó su repudio a cualquier acción que busque, por medio de las influencias del poder, beneficiar solamente a algunas personas, afirmando que la prevención de las Enfermedades Transmitidas por los Alimentos, son un esfuerzo permanente en la gestión de los funcionarios de la Autoridad Sanitaria, rpor lo que les parece preocupante que el ejercicio técnico de funciones claves, sea puesto en entredicho por situaciones anómalas y externas a su oficio.