Las inestables condiciones climáticas están provocando algunas alteraciones en la cosecha de este producto y como consecuencia de ello un leve retraso en la oferta chilena que pueden ser determinantes en el mercado nacional e internacional.
Según explicó Mauricio Momberg, pese a la actual condición hay buenas expectativas en calidad, cantidad y precios para la temporada 2015-2016. Es decir si bien no habrá un aumento en la producción por lo menos ésta se mantendrá en los mismos niveles del año pasado.
Agrega que el año pasado al igual fecha ya se estaban cosechando los primeros arbustos cargados de la fruta primeriza con gran cantidad de personas trabajando en la faena, sin embargo en esta ocasión el factor clima ha sido determinante en la demora.
Pese al traspié climático, según las previsiones de los grandes productores del mundo, el consumo de arándanos aumentará en un 500% en 2017; los motores de este crecimiento son los mercados asiático y europeo, donde esta fruta es popular por sus propiedades saludables. En tanto en Chile- explicó Momberg- del 100% de la producción sólo un 20% es consumo interno y el 80% restante se exporta a países como Alemania, E.E.U.U y China.