El equipo dirigido por Hernán Caputto arrancó de la peor manera, tras un tempranero gol charrúa gracias a Douglas Arezo (18′).
Pocos minutos después, vino el segundo gol para el cuadro comandado por Alejandro Garay, a través de Cristián Olivera (20′) que en aquel momento sentenciaba las ilusiones del equipo chileno.
Sin embargo, tras el descanso vino la mejor versión de la «Rojita» y gracias a sus incesantes ataques logró anotar el descuento mediante Luis Rojas (61’).
Y en el mejor momento del equipo chileno, Benjamín Osses (63’) marcó el empate que volvía a llenar de esperanza a los seleccionados nacionales.
Fue en los minutos finales que llegó la máxima alegría para los chilenos, pues Alexander Aravena (90’) aprovechó una desconcentración defensiva y marcó el 3-2 a favor que le entregó la clasificación.
El tanto de la alegría llegó gracias a Benjamín Osses que marcó el 4-2 y desató la euforia de todo el equipo en Lima.
Con este triunfo, Chile consiguió una histórica clasificación al Mundial de la categoría en Brasil de este año y quedó como sublíder del hexagonal final con 9 puntos.