La condición del agua es el principal impedimento para restablecer el suministro que se ha visto suspendido por casi cuatro años, pese a que las últimas muestras levantadas por funcionarios municipales evidenciaron que el agua sale más clara en la parte baja de la cuidad.
El alcalde de Queilen, Marcos Vargas, confirmó que la prohibición se extenderá, al menos por ahora, hasta fines de octubre.
La seremi de Salud de Los Lagos, Scarleth Molt, dijo que deben asegurar la calidad del servicio reforzando los muestreos para que sea óptimo para su distribución.
De acuerdo a lo solicitado por el municipio local, la idea es que se realicen muestreos tanto en la parte alta, como la parte baja de la ciudad.
El problema mantiene desde 2017 a poco más de 5 mil personas recibiendo agua desde estanques ubicados en las calles, debido a los altos índices de cloruro de sodio y turbiedad.
