No hay que entusiasmarse, ‘fue una coincidencia, pero al cerrar el mes no se puede esperar nada bueno’, dice Alonso Guajardo, meteorólogo de la Dirección Meteorológica de Chile, respecto de las precipitaciones que tienen a la mayor parte de las ciudades del sur del país con superávit los primeros nueve días de 2020.
Y pone en duda la antigua creencia de que el clima de los primeros 12 días del año tenga relación con el comportamiento climático de los meses que correspondan. ‘Puede ser una creencia local que no debiera tener sustento científico’, recalca y reafirma que el pronóstico, por lo menos hasta marzo, dice que serán meses secos.
Pero lo concreto es que desde Chillán al sur, salvo Valdivia (-34%) y Punta Arenas (-38%), todas las ciudades con estaciones meteorológicas que revisa la Dirección Meteorológica de Chile, marcan superávit de agua caída.
Ciudades como Puerto Montt, con 49 mm, marca un 158% de superávit respecto de un año normal, cuando debieran precipitar 19,3 mm; Temuco, con 15,8 mm, ya marca 100% de superávit respecto de un año normal (7,6 mm).
‘Se va a ir atenuando con el correr de los días’, dice Guajardo, quien explica que las precipitaciones se han originado en un sistema frontal, que provocó variaciones en vientos y precipitaciones (…) con momentos muy intensos y que luego descienden’.
Una lluvia de verano que sorprendió a lugareños y también a autoridades locales, que debieron enfrentar algunas emergencias, como la caída de árboles en Castro, Chiloé, donde un enorme pino se desplomó sobre un sector en el acceso norte a la ciudad, generando congestión.
En Osorno, la caída de árboles provocó daños a automóviles que estaban estacionados.
Aunque la lluvia en general fue evaluada como una buena noticia. ‘Claramente aumenta las napas subterráneas, lo cual es bueno. Para algunos cultivos no son recomendables (las lluvias de verano), pero evidentemente para las praderas (producción leche y carne) son realmente beneficiosas. Lamentablemente, la sequía se aminora solo con períodos más largos de lluvia, pero evidentemente es beneficioso para nuestra región’, dice el intendente (s) de Los Lagos, Daniel Lilayú.
Las lluvias también sorprendieron a turistas que además de las condiciones propias de una vía mojada enfrentan rutas desconocidas. Pese al control policial y a la señalética con restricciones, las rutas chilotas suman ya siete víctimas fatales en accidentes de tránsito en 2020.
Otros turistas que resultaron afectados por el clima fueron los pasajeros de un crucero que esta semana debió saltarse la recalada en Puerto Montt debido a las malas condiciones en el mar, que impedían bajar los tender, pequeñas embarcaciones en las que los pasajeros son acercados a los muelles desde el fondeo a la gira.