Así lo dictaminó el Tribunal Oral en Lo Penal de Puerto Montt, quien sentenció al imputado a siete años y 184 días de presidio efectivo tras provocar lesiones graves gravísimas a su pareja quien es insulinodependiente.
El hecho se registró en febrero de 2019 cuando el ahora sentenciado agredió con reiterados golpes de pies y puños a la que era su polola, encerrándola además por más de 30 horas en el domicilio que compartían.
Así lo detalló el fiscal de la causa, Gonzalo Meneses.
De acuerdo al persecutor, para llegar a esta sentencia efectiva de cárcel fue importante la colaboración de ambas policías, como asimismo la declaración de los peritos del Servicio Médico Legal, quienes explicaron las lesiones con que quedó la víctima y el daño fisiológico que le provocaron.