A través de la implementación de innovaciones técnicas en la radio, Agustín Inostroza dejó un importante legado en la profesionalización de la emisora.
Era un destacado profesional de las comunicaciones en Televisión Nacional de Chile y además contaba con una exitosa agencia de publicidad en Santiago.
Un verano viajó junto a su familia a Osorno, más precisamente al campo de unos amigos y uno de sus hijos, que estaba a punto de salir del colegio, al regreso del viaje le señaló sorpresivamente: “Papá, quiero estudiar algo relacionado con el campo. Lo haré en el Instituto Adolfo Matthei”, lugar donde estudiaba uno de los hijos de los amigos a quien visitaban.
“La verdad es que nos sorprendió mucho, porque pensamos que podría estudiar Agronomía en alguna Universidad en Santiago, pero él estaba determinado… así que ahí tomamos junto a mi señora, la decisión de trasladarnos a vivir a Osorno”.
En ese contexto, Agustín Inostroza siguió en el rubro de la publicidad, haciendo importantes campañas en nuestra ciudad. Sin embargo, el sur le tenía preparada una sorpresa.
INNOVADOR
“Un día, de la nada, vino un director de la SAGO y me ofreció hacerme cargo de la radio. La verdad es que como tenía experiencia en el área de las comunicaciones, me pareció un desafío interesante y acepté”, destaca el ex director.
Durante su gestión, que duró desde fines de los 80 hasta inicios de los 90, la radio consiguió fortalecerse en lo económico, posibilitando un desarrollo tecnológico que potenció las transmisiones y coberturas de la radio Sago y Osorno F.M.
“Hicimos muchas cosas, nuevos programas, nuevas trasmisiones que marcaron un hito. Recuerdo que gestionamos la adquisición de una camioneta y ésta la convertimos en un móvil. Fue ahí que comenzamos con las transmisiones de los rodeos, íbamos a todas las comunas cercanas donde se llevaran a cabo”, cuenta.
Después comenzaron a informar en directo los precios del ganado, desde las distintas ferias. Eso fue una gran herramienta para los agricultores que pudiera saber rápidamente donde les convenía llevar sus animales”.
“Mi desafío fue reposicionar a Radio Sago como una emisora de nivel nacional, de acuerdo a su rica historia. En esos tiempos no estaban las grandes cadenas de radio, uno debía hacer gestiones propias para conseguir cosas y poder crecer, innovar. Eso fue lo que yo quería lograr, que radio Sago estuviera a la par con las radios de Santiago y la verdad es que quedé muy satisfecho. Finalmente de Osorno tengo grandes recuerdos. Si bien por razones personales decidimos volver a vivir a Santiago, mis recuerdos tanto en el ámbito profesional como en lo personal son muy buenos, hicimos grandes amigos”.