El Presidente de la República Sebastián Piñera anunció este viernes, durante la cuenta pública, que promulgó el plan para la clase media que había sido propuesto por el gobierno y despachado por el Congreso, y que incluye un bono de 500 mil pesos, además de la ampliación del Ingreso Familiar de Emergencia para cerca de 200 mil personas más de las que abarcaba.
Con la promulgación de ambos beneficios, que consisten en una ayuda económica directa a miles de chilenos, solo falta la toma de razón de la Contraloría y la publicación en el Diario Oficial para que ambos proyectos sean una realidad.
El ministro de Hacienda Ignacio Briones, aseguró que se podrá acceder al beneficio de la clase media en el sitio web del Servicio de Impuestos Internos (SII) diez días después de publicada la ley.
El bono para clase media, que nació para evitar que se aprobara el proyecto que permite el retiro de hasta el 10 por ciento de los fondos de pensiones, incluye a quienes antes de la crisis provocada por el COVID-19 recibían un sueldo entre 400 mil pesos y $1,5 millones, y han visto disminuido en al menos un 30 por ciento sus ingresos.
A ellos se les entregarán 500 mil pesos y podrán acceder además a créditos blandos, con tasa 0% de interés, postergar el pago de dividendos hipotecarios, postergar el pago del CAE y de contribuciones para el segundo semestre.
La ampliación del Ingreso Familiar de Emergencia (IFE) en tanto, que fue creado para ayudar a los trabajadores informales que verían reducidos sus ingresos por el confinamiento, y también para algunos pensionados, llegará a cerca de 200 mil personas más, según los cálculos oficiales, y entrega 100 mil pesos por personas a las familias sin ingresos.
Una de las modificaciones al proyecto es la que rebaja la edad de los adultos mayores con Pensión Básica Solidaria (PBS) desde 70 a 65 años, lo que incorporó a 70 mil nuevos potenciales beneficiarios del aporte de $100.000 que contempla la normativa.
A ella, se agregó de manera sorpresiva otra indicación en que el gobierno sumó a un nuevo grupo de jubilados integrados por quienes reciben Aportes Previsionales Solidarios (APS) ya sea por vejez o invalidez, acogiendo con ellos parte de las preocupaciones de los parlamentarios durante la discusión del proyecto en la comisión.