La empresa noruega Statkraft, titular del proyecto de Central hidroeléctrica “Los Lagos”, a través de una declaración pública, se refirió a la usurpación de la que fue objeto el Fundo Carimallín, en Rio Bueno, por parte de representantes de comunidades indígenas.
«La compañía condena este tipo de acciones que están totalmente fuera de la ley, y seguirá todas las instancias legales a su alcance para perseguir las responsabilidades de esta situación», asegura la empresa.
Statkraft lamentó la campaña de desinformación desarrollada a través de redes sociales que entrega información equivocada en relación con los impactos reales del proyecto Los Lagos, asegurando que ha realizado un proceso de participación pública informada en terreno desde 2017, con el objetivo de dar a conocer el proyecto a las comunidades de la zona e informar de su próximo inicio de construcción.
La empresa aseguró que el proyecto Los Lagos no tiene ningún tipo de afectación sobre sitios sagrados para el pueblo Huilliche, ya que se desarrollará en terrenos de privados donde no hay propiedad indígena, agregando que a partir del hallazgo de algunos fragmentos arqueológicos, dispuso de un plan de rescate aprobado por el Consejo de Monumentos Nacionales (CMN), sumando a un arqueólogo permanente en el equipo a cargo de construír la central.
Statkraft señaló que de forma voluntaria, tomó la determinación de retrasar el inicio de los proyectos Los Lagos y Osorno, con la finalidad de establecer un proceso de diálogo y comunicación con las comunidades presentes en la zona, incluso modificando una de las iniciativas para definir un diseño en conjunto con la comunidad, y eliminar cualquier impacto sobre el sitio ceremonial del Ngen Mapu Kintuante, que la empresa ya propuso restituir al Pueblo Huilliche, en un rediseño que deberá ingresar al Sistema de Evaluación Ambiental
Statkraft adquirió en 2015 la propiedad de la central Rucatayo y los proyectos Los Lagos y Osorno, ambos con Resolución de Calificación Ambiental (RCA), aprobados ambientalmente.
Declaración Púbica
OSORNO, 01 de julio de 2019.- Durante la jornada de ayer 30 de julio, cuatro camionetas con cerca de 15 personas ingresaron por la fuerza y sin autorización al Fundo Carimallín, en Osorno, lugar donde se iniciarán las obras de construcción de la central hidroeléctrica Los Lagos, de Statkraft Chile.
La compañía condena este tipo de acciones que están totalmente fuera de la ley, y seguirá todas las instancias legales a su alcance para perseguir las responsabilidades de esta situación.
La firma lamenta la campaña de desinformación que se está desarrollando a través de redes sociales y que está entregando información totalmente equivocada en relación con los impactos reales del proyecto Los Lagos. Cabe destacar que Statkraft ha realizado un proceso de participación pública informada en terreno desde 2017, con el objetivo de dar a conocer el proyecto Los Lagos a las comunidades de la zona e informar el próximo inicio de construcción.
Statkraft adquirió en 2015 la propiedad de la central Rucatayo y los proyectos Los Lagos y Osorno, ambos con Resolución de Calificación Ambiental (RCA), aprobado ambientalmente. Cabe destacar que el proyecto Los Lagos, que es independiente al proyecto Osorno, no tiene ningún tipo de afectación sobre sitios sagrados para el pueblo Huilliche, ya que se desarrollará en terrenos de privados donde no hay propiedad indígena.
En relación con el hallazgo de algunos fragmentos arqueológicos (pequeños trozos de cerámica y piedras talladas) en el proyecto Los Lagos, la compañía cuenta con un plan de rescate aprobado por el Consejo de Monumentos Nacionales (CMN). Además, contará con un arqueólogo permanente durante la construcción del proyecto.
La compañía, de forma voluntaria, tomó la determinación de retrasar el inicio de ambos proyectos, con la finalidad de establecer un proceso de diálogo y comunicación con las comunidades presentes en la zona. En el contexto de este proceso de diálogo, la empresa decidió no construir el proyecto Osorno tal como fue presentado originalmente y espera definir un diseño en conjunto con la comunidad, con la finalidad de eliminar cualquier impacto sobre el sitio ceremonial del Ngen Mapu Kintuante, sitio que Statkraft ya propuso restituir al Pueblo Huilliche. Este nuevo diseño deberá ingresar al Sistema de Evaluación Ambiental.
La compañía reafirmar su compromiso con el diálogo abierto y la búsqueda del entendimiento. Para Statkraft es especialmente importante la relación con las comunidades mapuches presentes en la zona y también con todos vecinos del entorno.