Las declaraciones del diputado Jaime Sáez (FA) sobre la necesidad de regularizar a los migrantes que ya se encuentran trabajando en Chile provocaron un fuerte rechazo tanto en el oficialismo como en la oposición. Sáez sugirió crear «planes» para que extranjeros en situación irregular puedan acceder a empleos formales, lo cual, según sectores de oposición, podría ser una contradicción en la política migratoria y generar un «efecto llamada» para más ingresos ilegales.
La propuesta del jefe de bancada del Frente Amplio despertó críticas incluso entre sus colegas. El diputado independiente Jaime Araya (Ind.-PPD) comentó que el Frente Amplio debe evitar el «buenismo» y enfocarse en la realidad que viven muchas familias chilenas, cuya calidad de vida se ha visto afectada. Por su parte, Andrés Longton, diputado de Renovación Nacional, calificó las declaraciones de Sáez como “irresponsables” y advirtió que medidas de este tipo pueden incentivar el ingreso irregular de migrantes. «No les basta ver cómo está el país», señaló Longton, enfatizando que las cifras actuales revelan dificultades en la gestión migratoria.
La migración irregular y las políticas para abordarla siguen siendo un tema divisivo en el Congreso, y el debate se intensifica con estas declaraciones. El tema promete mantenerse en la agenda política, ya que las distintas posiciones reflejan la complejidad y el impacto de la migración en la sociedad chilena.