El Banco Central reveló esta mañana en sus Cuentas Nacionales que durante el año 2024, la actividad económica aumentó 2,6% respecto al año anterior, impulsada principalmente por las exportaciones.

Ese dato, es levemente mejor que la proyección que había sido estimada en los Índice Mensual de Actividad Económica (Imacec), ya que calculaba un crecimiento de 2,5%.

Además, el instituto emisor corrigió a alza la expansión de 2023, ya que en un principio era 0,2%, pero según la entidad, ahora es de 0,5%.

Lo mismo ocurrió para el año 2022, debido a que se reestimó al alza, pasando levemente de de 2,1% a 2,2%. Por esa razón, es que el crecimiento promedio de los tres años de la administración de Gabriel Boric es de 1,8%.

En concreto, según el informe, la demanda interna presentó un crecimiento de 1,3%, resultado que se explicó por un mayor consumo.

Respecto del año anterior, el 2024 presentó un día hábil más y un día adicional por año bisiesto, resultando un efecto calendario de 0,2 puntos porcentuales.

Desde la perspectiva del origen, según el instituto emisor «las principales contribuciones al crecimiento del producto interno bruto (PIB) se registraron en la minería, el comercio, los servicios personales y el transporte. En contraste, los servicios empresariales y financieros fueron las actividades que mayormente incidieron a la baja».

«En términos desestacionalizados, el PIB exhibió una aceleración en el último trimestre del año que fue incidida, principalmente, por las actividades de servicios, en particular empresariales, y resto de bienes donde destacó la actividad agropecuario-silvícola. En contraste, la minería retrocedió en términos trimestrales», señala el documento.

Desde la perspectiva del gasto, la entidad que lidera Rosanna Costa señala que «el incremento del PIB se sustentó en las exportaciones y, en menor medida, en la demanda interna, la que reflejó un mayor consumo de hogares y gobierno. La inversión, en tanto, aumentó impulsada por la variación de existencias, efecto que fue atenuado por una caída en la formación bruta de capital fijo (FBCF)».

Respecto del consumo de los hogares, se notificó que creció 1%, «resultado en el que contribuyeron todos sus componentes. Destacó el dinamismo del consumo en bienes durables, en particular de productos tecnológicos».

«También incidieron en el resultado el mayor gasto en servicios de transporte y en bienes no durables tales como vestuario, calzado, y productos farmacéuticos, cosméticos y de limpieza. El consumo de gobierno, por su parte, aumentó 3% destacando el gasto asociado a salud pública», agrega el documento.

La inversión registró una variación de 1%, cifra que combinó un efecto positivo de la variación de existencias y una caída en la FBCF. En efecto, el período exhibió una desacumulación de existencias menor a la registrada en el 2023, alcanzando un ratio anual de -0,3%.

Por su parte, la contracción en la FBCF (-1,4%) fue consecuencia de una menor inversión en equipos de transporte y edificación.

Comercio exterior

Respecto del comercio exterior, tanto las exportaciones como las importaciones de bienes y servicios aumentaron, con un efecto neto positivo en el PIB. Las exportaciones crecieron 6,6%, impulsadas por el componente de bienes y, en menor medida, por los servicios.

Los primeros fueron incididos por los envíos de cobre, fruta –cerezas y uva– y celulosa, y los segundos por los servicios de turismo y transporte. Las importaciones aumentaron 2,5%, incididas principalmente por las internaciones de bienes, en línea con mayores importaciones de químicos, vestuario y alimentos. En tanto, las importaciones de servicios cayeron marginalmente.

Acorde a cifras con ajuste estacional, la aceleración del PIB en el cuarto trimestre se explicó por la demanda interna, en particular por la variación de existencias. En contraste, las exportaciones netas incidieron a la baja, restando al resultado anterior.

El ingreso nacional bruto disponible real creció 2,8% durante el año, resultado mayor al observado en el PIB, lo que se explicó por un aumento en los términos de intercambio, efecto que fue parcialmente compensado por mayores rentas pagadas al exterior.

El ahorro bruto total ascendió a 23,2% del PIB en términos nominales, compuesto por un ahorro nacional de 21,8% del PIB y un ahorro externo de 1,4% del PIB, correspondiente al déficit en cuenta corriente de la Balanza de Pagos.

Fuente: Emol.com