Después del rechazo a la Reforma Tributaria en la Cámara Baja, en marzo pasado, la tarea del Gobierno del Presidente Boric era buscar una nueva fórmula.
Es así, desde que se anunció este “Pacto Fiscal” en la Cuenta Pública del pasado 1 de mayo, finalmente tres meses después, se conocieron detalles del mismo.
En síntesis, se anunciaron 20 medidas de reforma del Estado, 38 medidas para impulsar la inversión, la productividad y el crecimiento; y dos proyectos de ley tributarios, uno sobre el combate a la evasión y elusión y otro, con incentivos para la formalización y beneficios para la clase media.
Un anuncio que no comparten desde la academia. El economista y docente de Ingeniería Comercial de la Universidad de Los Lagos, René Reyes, detalló que si se quieren aumentar los ingresos fiscales, tiene que haber crecimiento económico, cosa que en estos momentos, no sucede, precisó.
Según Reyes, el cuestionamiento es por la incertidumbre que generará esta idea de recaudar impuestos y por no priorizar una agenda pro crecimiento.
Asimismo, el académico enfatizó en que estos anuncios responden a un tema político, más que a criterios firmemente económicos, a pesar de que las tratativas siempre estuvieron por el Ministro de Hacienda, Mario Marcel.
Cabe mencionar que con este pacto fiscal, el Gobierno espera recaudar US$8 mil millones, equivalente al 2,7% del PIB, lo que permitiría financiar urgencias en materias de pensiones, salud, seguridad ciudadana y protección social.
