El 59 % de las familias se han negado a donar los órganos de algún pariente fallecido, en 2019, de acuerdo con cifras del Ministerio de Salud citadas por La Tercera. La cifra es la más alta en 20 años.
Cuando se activa el protocolo de procuramiento, una de las etapas es consultar a la familia si respetarán la voluntad que el potencial donante tomó en vida. Seis de cada diez deciden no hacerlo.
“Nosotros suponemos que la negativa familiar variará en la medida en que nosotros conversemos en la casa acerca de lo que nosotros queremos para nuestro futuro en caso que tengamos una causa de muerte encefálica”, dijo el Coordinador Nacional de Trasplantes del Ministerio de Salud, Juan Eduardo Sánchez.
La autoridad, además, abogó por un cambio cultural para «que se haga una transición desde un país que tiene un registro de no donantes abultado y que se manifiesta en el peor de los momentos, que es a través de la negativa familiar, hacia un país de donantes en que la familia respete lo que la persona determinó en vida«.
Actualmente, hay cuatro millones de personas en la lista de no donantes del Registro Civil. De ellas, 13 mil personas se inscribieron vía notarial para no ser donantes.
Sin embargo, hay muchas que aparecen sin haber expresada que esa sea su voluntad y, por ello, desde marzo de 2019 está abierto un proceso para que las personas confirmen que no son donantes en una notaría o el mismo Registro Civil, hasta el 12 de marzo de 2020.
Quienes no hagan el trámite, serán considerados donantes desde el 12 de septiembre del mismo año. Desde esa fecha, las familias no podrán negar la voluntad certificada de los fallecidos.