Por Rodrigo Carrasco
Director Corfo Los Lagos
El Programa Territorial Integrado Lechero (PTI) lleva dos años de intenso trabajo buscando nuevas oportunidades para los productores de leche, quienes son parte de una industria ancestral que se ha ido traspasando de generación en generación y que casi no ha variado en el tiempo. Uno de los programas más esperados por el sector que ha permitido un trabajo muy coordinado entre Corfo, Aproleche Osorno, Agrollanquihue y Acoleche realizando una serie de actividades orientadas a sus asociados, en colaboración con el Centro de Estudios de la Universidad de Santiago, INIA las Seremías de Economía, Agricultura, ProChile, el Gobierno Regional de Los Lagos y Codesser.
Precisamente, esta es una de las claves de un programa en cuyos diversos objetivos busca trasformar una producción de antaño en una del futuro, generando la oportunidad de abrir un nuevo modelo de negocio y agregarle valor a nuestra leche a través de la fabricación de quesos, de la exportación de productos con valor agregado, y de la asociatividad en la economía de escala ya sea en la venta o en la compra, entre otras acciones.
Los productores de leche de nuestra región aseguran excelencia y calidad en su diaria labor. Sus vacas viven y se alimentan en el entorno natural, limpio y protegido de las praderas del sur, que conlleva a una producción sana en cuanto al crecimiento y desarrollo de los animales. Por eso Chile es considerado como uno de los mejores lugares para la producción de leche del mundo.
Sin embargo, debemos ser capaces de sacar un mayor provecho a esta distinción. Es necesario informar las grandes bondades y posibilidades de la industria de la leche y potenciar sus atributos más valorados por el mercado. Un productor de leche del sur debe ser capaz de trasmitir dónde, cómo y porqué produce, entre otras cualidades inherentes a la producción. Hoy, no somos capaces de comunicar todo aquello y es una pérdida, porque en todas esas respuestas hay valor agregado al producto.
La pandemia de Covid 19 nos ha impuesto, como una urgencia, incorporar la digitalización de las empresas productoras de leche, que es un proceso que va mucho más allá de robotizar la ordeña; y que apunta más bien, a digitalizar los procesos de los componentes del modelo de negocio, como por ejemplo la compra en línea, la asociatividad de control de calidad o el traspaso de buenas prácticas en línea. Es decir, todos los procesos de logística, de compras, de ventas, de despacho son digitalizables. Y esto hasta ahora no lo habíamos incorporado.
El coronavirus ha dejado en claro que la producción de alimentos es relevante. Por lo mismo, la industria de la leche debe modernizarse, modificar algunos de sus procesos, hacer ciertos ahorros y adaptarse a las condiciones que va imponer la nueva demanda. Si la lechería del sur de nuestro país logra modificar y digitalizar algunos de sus métodos, abrirse al mercado de exportación y agregarle valor a su producto, el futuro que se viene por delante es promisorio para la leche del sur de Chile. Desde Corfo Los Lagos, pondremos energía para apoyar a los productores en ese objetivo.
