Un reportaje de Canal 13 reveló nuevas denuncias de conductas inapropiadas por parte de sacerdotes de la Iglesia católica en la Diócesis de Rancagua. Feligreses aseguran que entregaron sin éxito los antecedentes de la denuncia antes de la visita del Papa, hace más de un año, al obispo de la zona, Alejandro Goic, quien además preside el Consejo de Prevención de Abusos.
La acusación aseguró la existencia de una «cofradía» de sacerdotes que se autodenomina «la familia», y que habría realizado prácticas inadecuadas como bromas de carácter sexual y solicitudes de actos sexuales a menores de edad.
El obispo Goic se defendió asegurando que la denunciante nunca le entregó «una prueba concreta», comentando que «no estudié para detective, yo estudié para ser pastor y para servir a la gente».
Imagen de contexto.
