Gente corriendo antes del cierre de las mesas de sufragio y largas filas durante la tarde fueron parte del paisaje electoral de ayer domingo, donde los electores de la región participaron activamente de las Primarias Presidenciales.
En total, 109.913 personas sufragaron en este proceso, lo que representa el 14,8% del padrón electoral, que llega a las 740.366 personas.
En comparación con la primaria de 2017 hubo un alza de 5,2%, ya que en esa oportunidad solo votaron 64.528 electores de un total de 668 mil.
Para el académico Guillermo Díaz, académico del Centro de Estudios del Desarrollo Regional (CEDER) de la Universidad de Los Lagos, lo vivido ayer refuerza la tesis sobre el cambio que está teniendo el electorado.
En relación al análisis político, expresó Díaz que las grandes derrotadas fueron Yasna Provoste y Paula Narváez, al no participar y aprovechar la vitrina mediática de la elección.
Asimismo, indicó que el elector optó por posiciones más de centro y no tan beligerantes.
Así lo sostiene también Federica Sánchez, politóloga de la Universidad Alberto Hurtado.
En relación a la alta cifra obtenida por Gabriel Boric, Sánchez comentó que hubo voto cruzado, aunque solo se constatará en la elección de noviembre, ya que ahora es solo especulación política.
Por ahora, solo resta esperar qué determinación tomará el bloque de centro-izquierda, que ya está evaluando realizar o no otra primaria, en medio del estrés electoral de la ciudadanía.
