Un informe del Centro de Incidencia Pivotes sostiene que la actividad salmonera en el país está sufriendo un estancamiento, lo que reduciría su participación en el mercado mundial, pasando del 38% actual -segundo productor del orbe- a un 17% en el 2050.
De esta forma, dice el trabajo, Noruega se consolidaría como el principal productor, cuya industria espera triplicar su producción a ese año.
La salmonicultura, afirma la investigación realizada por Joaquín Sierpe, economista de la Universidad de Chile, tiene hoy dos aspectos negativos: Estancamiento y una negativa reputación ambiental.
De acuerdo a los datos del trabajo, de las 1.353 concesiones entregadas desde 1981 hasta 2022, solo 15 han sido otorgadas en los últimos 7 años, mientras que en Noruega este problema no existe.
Pero el análisis, también destaca la incidencia que ha tenido la salmonicultura chilena en el aspecto social, como en la reducción de la pobreza en las zonas donde se ha instalado, además del nivel de remuneraciones de los trabajadores que «ganan, en promedio, 11,4% más que el promedio nacional, llegando esta cifra a ser 22,2% y 22% más alta en Los Lagos y Aysén».
«Esto no es trivial, ya que el contrafactual en dichas zonas era la ausencia de otras industrias, por lo que no se hubiese materializado el alza de empleos y, por lo tanto, el alza en los salarios que generó dicha reducción de la pobreza», dice el economista Sierpe.
Revisa acá el informe completo 240215-Una-mirada-a-la-salmonicultura-chilena-VF