Las declaraciones del expresidente Eduardo Frei Ruiz-Tagle y del presidente de SalmonChile, Arturo Clément, criticando al Estado por subvalorar la importancia de la industria salmonera, la segunda más importante del país, han abierto un espacio de análisis para comprender hacia dónde se dirige esta relación.
En el detalle, Clément dijo que el aparato estatal necesita un rediseño en el trato con el sector salmonicultor y Frei-Ruiz Tagle, valoró que esta empresa privada ha sido motor de crecimiento, sin necesitar subsidios del Estado.
Por lo mismo, en la línea de comprender y reflexionar sobre la hoja de ruta que deberían seguir los entes públicos y privados, aparece el concepto del “compliance”, el cual significa, en palabras simples, el marco normativo y legal que requieren los protagonistas, según explicó José Ignacio Camus, de la consultora Admiral Compliance, especialista en gestión de riesgo empresarial.
El concepto de “compliance” circunscrito a la industria del salmón, se centra en reforzar los estándares actuales, los cuales ya son altos, pero, ralentizan los niveles de producción, sostuvo José Ignacio Camus.
Un desafío importante que fue abordado en el Salmón Summit por diversos actores, entre ellos, la exministra de Defensa del primer gobierno de Michelle Bachelet, Vivianne Blanlot, quien dijo que se deben dejar atrás los prejuicios desde ciertos sectores políticos hacia la salmonicultura. Reflexión a la que se unió el especialista en cumplimientos empresariales entrevistado por Radio Sago.
Una de las ideas centrales del Salmón Summit 2024 fue proyectar a la industria, al Chile de 2050. ¿Se podrá conseguir un acuerdo que fortalezca la relación actual entre los salmoneros y el Estado? Solo el tiempo lo dirá, donde la variable económica tendrá un peso sumamente relevante.
