Luego del impacto que causó a nivel provincial un caso de eventual acto negligente de la red de salud en Chiloé que derivó en la muerte de un pequeño recién nacido en el Hospital de Ancud, y que escondería un posible acto criminal, el Ministerio Público decidió abrir una indagatoria penal para determinar todo lo que pasó y definir responsabilidades.
De acuerdo a los antecedentes habrían indicios de un posible cuasidelito de homicidio, y aunque desde el centro asistencial no se había querido caratular lo que pasó como un ilícito de dichas características, la Fiscalía decidió iniciar una investigación de oficio por todo lo que pasó entre la tarde del 25 de febrero y la madrugada del 26 de febrero pasado, así lo confirmó el Fiscal adjunto de Castro Fernando Metzner.
Gremios del Hospital de Ancud reaccionaron cuestionando la forma en que actuó el Hospital de Castro ante la emergencia que se presentó a fines de febrero pasado.
En una declaración pública, en primer término, Pamela Araneda, presidenta de la FENPRUSS, en nombre del estamento de matronas, se refirió a lo sucedido apuntando a que los directivos del Hospital Augusto Riffart de Castro y del Servicio de Salud Chiloé, no habrían gestionado debidamente dicha urgencia.
En la ocasión, criticaron la burocracia ante situaciones de vida o muerte que se presentan en la red asistencial de Chiloé y que no se flexibilizan los protocolos cuando las personas están en riesgo vital.
Durante esta jornada y ayer lunes, nuevamente se realizó a primera hora de la mañana una manifestación en el frontis del Hospital de Ancud, en esta ocasión para pedir la remoción de sus cargos de los directivos del establecimiento y del servicio de Salud Chiloé, ante los hechos acontecidos en los últimos meses en el recinto.