El ex Presidente Eduardo Frei Ruiz-Tagle afirmó en Cooperativa que la sentencia del juez Alejandro Madrid por el magnicidio de su padre «abre una gran puerta» para investigar las responsabilidades, en dicha causa, de la Universidad Católica y del Ejército, que -afirmó- nunca han querido colaborar con su esclarecimiento.
«Estamos con una tremenda tristeza, porque se han transformado en certezas las sospechas que tuvimos a partir del año 2000», comentó Frei a El Diario de Cooperativa, al analizar las implicancias del fallo que condenó a los seis procesados.
«Yo creo que esto abre una gran puerta (…) para que se investiguen las responsabilidades de las autoridades y, al mismo tiempo, el silencio que ha habido en instituciones como la Universidad Católica y el Ejército, que jamás han querido colaborar, ni en el caso Frei ni en otros casos», sostuvo el ex Mandatario.
«Caso dramático»
«El caso de la Universidad Católica es dramático, porque Frei fue alumno distinguido, gran premio de honor en su época, en el año 1933; fue doctor honoris
causa de la Universidad, profesor de la Universidad, primer Presidente de Chile de la Universidad Católica; es decir, hizo toda su vida ligado a la Universidad, y ésta nunca prestó ninguna ayuda, sino (que hizo) todo lo contrario: perturbar, dilatar», remarcó Frei Ruiz-Tagle.
El ex Presidente agregó que profesionales del plantel, «en un acto despiadado, hicieron prácticamente una carnicería al sacarle del cuerpo (a Frei Montalva) todas las cosas que podían demostrar que estaba siendo envenenado».
«¿Quiénes lo hicieron? Dos médicos. ¿Quién los mandó? Nadie sabe, pero resulta que estos mismos médicos que ahora alegan inocencia, pocos meses después fueron a la Universidad Católica a ver los resultados. Eso fue el año 1982, pero nosotros vinimos a saber por un dato que nos pasaron desde la misma clínica en el año 92 (…) Madrid entra el 2003 y hace el allanamiento en la Universidad Católica después de que es nombrado ministro en visita y se lleva toda la documentación, y ahí hay muchas etapas y muchas personas responsables… Nunca ha querido colaborar la Universidad Católica», insistió Frei hijo.
«Lo mismo pasa con el Ejército. Yo he hablado con todos los comandantes en Jefe posteriores a Pinochet y todos dicen lo mismo: ‘No tenemos los documentos’, y
resulta que hace menos de tres años (…) se quemaron todos los documentos microfilmados de muchos casos; no solamente el caso Frei», rememoró el ex Jefe de Estado.
No descarta buscar «penas mayores»
Eduardo Frei Ruiz-Tagle insistió en el carácter «histórico» del fallo, más allá de que la cuantía de las penas se pueda considerar insuficiente. Destacó el descubrimiento de las aristas de uso de químicos como el gran aporte del ministro Madrid.
«Para nosotros el fallo de ayer es histórico. Frei Montalva es el único Presidente de Chile que ha sido asesinado, es el único magnicidio en toda la historia de Chile, y que después de 20 años de investigación eso se haya podido saber, después de todo lo que taparon, después de las mil y una trabas que pusieron en la investigación (es positivo). A nuestros abogados los amenazaron el año 2010, cuando (se dio) el primer fallo de Madrid», que caratuló la causa como homicidio, recordó el ex Mandatario.
«Lógicamente las penas son bajas, (pero lo son) porque corresponden a esa época. No hay que olvidar que el proceso de Madrid se lleva con el sistema antiguo», señaló Frei, que no descartó que los abogados de la familia emprendan «apelaciones para que las penas sean mayores».
«Pinochet estaba informado»
Eduardo Frei resaltó que, «según el proceso, Pinochet estaba informado» de los planes para matar a su padre: «Es evidente que era informado día a día, especialmente por el doctor Silva (Garín)».
«El punto es (saber) en qué momento se toma la decisión, quiénes toman la decisión. Por eso yo digo ayer en mi declaración que hay que establecer la verdad completa
del asesinato de Frei (Montalva); no se detiene aquí la investigación, hay que conocer las responsabilidades políticas y ésa es la próxima tarea, especialmente de las nuevas generaciones, de los nietos y los bisnietos del Presidente Frei: es decir, determinar con detalle cuáles fueron las altas autoridades de Gobierno de la época que planificaron y financiaron todo esto», expuso.
La investigación determinó que «había laboratorios clandestinos, clínicas clandestinas; mataron a mucha gente, los presos de la Cárcel (Pública) y tantos otros casos (…) A Frei lo seguían en su casa, le tenían micrófonos en todas partes, cuando iba a Santo Domingo lo seguían, cuando iba a hablar con el cardenal lo seguían, lo seguían en todos los países extranjeros donde era recibido».
«Eso era una tremenda organización, y ¿quién la financiaba y organizaba?», cuestionó, indicando que incluso en años recientes «toda la gente que estaba cerca del caso Frei era permanentemente amenazada, seguida, controlada, por el solo hecho de estar buscando la verdad».
«Quedan cosas por descubrir»
El ex Presidente destacó también en Cooperativa que el fallo del ministro Madrid dejara establecido que «la segunda operación fue innecesaria, y ésa fue la que mató a Frei, porque le sacaron un pedazo de intestino, y ahí produjeron una verdadera explosión en un cuerpo que estaba diezmado, absolutamente debilitado por los productos que le ponían».
«Ése es el gran avance y por eso estamos tranquilos: que, después de tantos años, se sepa la verdad, una verdad irrefutable». Sin embargo, «aún quedan una serie de cosas por descubrir: por ejemplo, cómo se produce el contacto entre el agente (Raúl) Lillo -que es coautor (del homicidio), que fue de la CNI y después del DINE-, que fue quien reclutó al chofer (Luis Becerra), que fue chofer y mozo en la casa de Frei por más de 10 años, y fue el Judas que lo traicionó, que se vendió, pagado por el Ejército», expuso.
Sobre la polémica de Luis Castillo
El ex Presidente Frei Ruiz-Tagle defendió, finalmente, su permanencia como embajador en Misión Especial para el Asia-Pacífico, que le ha valido críticas incluso desde su familia por darse en paralelo a la presencia en el Gobierno del subsecretario Luis Castillo, a quien apuntan como encubridor del asesinato, pese a que el juez Madrid descartó responsabilidad penal en la persona de éste.
«Yo tengo un cargo en el que me nombró la Presidenta Bachelet y me confirmó el Presidente Piñera, que no tiene nada que ver (con el caso del subsecretario
Luis Castillo). Es un tema de Estado; yo he trabajado por Chile durante todos estos años, con grandes avances», señaló.
«En este caso hay un dictamen (…) y si eso (lo de Luis Castillo) es un tema ético, es un tema que, según lo que se lee en el fallo, no hay un cargo penal; bueno, las personas tienen que asumir sus responsabilidades y las autoridades que lo han nombrado tendrán que tomar su decisión. Con eso digo lo que tengo que decir», sentenció.
Fuente: Cooperativa