Los funcionarios de la Dirección General de Aeronáutica Civil (DGAC) alcanzaron un acuerdo total con el Gobierno, poniendo fin a la paralización que había afectado a los aeropuertos del país desde el miércoles. La medida de presión, que se intensificó con una «ralentización indefinida», concluyó tras un compromiso del Gobierno que garantiza mejoras económicas a partir de 2025.
El acuerdo contempla un bono universal y permanente para todos los trabajadores de la DGAC, incluyendo controladores aéreos, instrumentistas, meteorólogos, personal de seguridad aeroportuaria, administrativo y auxiliar. Aunque no se especificaron los montos finales, las negociaciones consideraban una bonificación mensual de 30 mil pesos para 2025 y un aumento a 50 mil pesos desde 2026.
El director de la DGAC, general de aviación Carlos Madina, confirmó que «las operaciones del Aeropuerto de Santiago y de toda la red del país están aseguradas», mientras que el subsecretario para las Fuerzas Armadas, Galo Eidelstein, calificó el acuerdo como un «avance sustancial para los funcionarios de la institución y para la aeronáutica nacional».
En las conversaciones participaron las principales asociaciones de trabajadores de la DGAC: la Asociación Nacional de Funcionarios, la Asociación Nacional de Funcionarios Especialistas en Seguridad Aeroportuaria (Anesa) y la Asociación de Trabajadores Operativos y Fiscalizadores (ATOF).
Con este entendimiento, las operaciones en aeropuertos y aeródromos de todo el país vuelven a la normalidad, garantizando la continuidad de los servicios aéreos en un sector clave para la conectividad y el desarrollo nacional.