Diversas reacciones generó la decisión de la Fiscalía Oriente, que este viernes informó sobre la detención de dos ex carabineros que estaban siendo investigados como posibles autores de la balacera que se produjo durante una manifestación la noche del pasado lunes, en la comuna de La Florida, y que dejó 10 heridos.
Tras las investigaciones del hecho, el cual se produjo en medio del toque de queda y de una protesta contra el Día del Carabinero, dos ex carabineros fueron asociados como los posibles responsables de los disparos, por lo que fueron detenidos por la Policía de Investigaciones (PDI) y dados de baja de la institución.
Ante esto, el subsecretario del Interior, Juan Francisco Galli, indicó que desde el Gobierno presentaron una querella por homicidio frustrado. «Aquellas personas que cometen delitos van a ser perseguidos por la justicia y por las policías, y esas investigaciones llevarán a determinar la responsabilidad que tuvieron en los hechos». Respecto al incidente, la autoridad destacó que: «Fueron dos personas que, siendo parte de la institución, además siendo funcionarios públicos, teniendo la obligación de cumplir con los principios de probidad y de responsabilidad en el cumplimiento de la función pública, estando en sus horas de civil, cometieron un delito».
Por su lado, Mario Rozas, General Director de Carabineros, señaló en un video que «hay que esperar que la justicia aclare lo sucedido», enfatizando en que «aquellos que se alejen de nuestra formación y doctrina no representan, si siquiera una ínfima fracción de lo que somos».
«Los invito a todos a repudiar con fuerza los actos que se aparten de la Ley o de nuestras normas y caminar con la frente en alto, sabiendo que esas pocas excepciones, están muy lejos pero muy lejos de ser la regla, aunque algunos digan lo contrario», añadió.
