La ministra vocera de Gobierno, Camila Vallejo, se refirió este domingo a la polémica surgida luego de los cuestionamientos que realizó Gil Artzyeli, embajador de Israel en Chile, a las palabras sobre el conflicto armado que se vive en Medio Oriente desde este sábado por parte del canciller Alberto van Klaveren.
Ayer, el ministro de Relaciones Exteriores señaló en su cuenta de X que «hacemos un llamado a todas las partes involucradas en los actos de violencia en Israel y los territorios palestinos a respetar ese principio básico».
«Eso vale para Hamás, la Yihad islámica, el Estado de Israel y cualquier otro actor que intervenga en el conflicto», agregó.
Ante esto, Artzyeli afirmó que «¡Israel tiene todo el derecho, y la obligación, de defenderse! Muy desafortunado que mientras sigue el ataque que nos ha costado cientos de vidas de israelíes masacrados, heridos y secuestrados, se ponga en duda el derecho de Israel de defenderse».
«Mencionar a Israel junto con Hamás y la Yihad islámica, grupos terroristas islámicos apoyados por la dictadura iraní, es lamentable», añadió.
Ante esto, Vallejo aseguró en Estado Nacional que de ninguna manera Van Klaveren quiso igualar la condición y situación de Hamás, la Yihad islámica y el Estado de Israel, pero sí aseveró que condenan los ataques a civiles, vengan de donde vengan.
«No estamos igualando un gobierno, un estado (…) Estamos igualando el derecho de las personas, pero no estamos diciendo que es lo mismo Hamás que el gobierno de Palestina, que el estado de Israel, que quien sea», afirmó.
Sobre lo mismo, Vallejo aseguró que «ni nosotros ni nuestra Cancillería ha cuestionado jamás la legítima defensa. Lo que se está señalando es que, aun haciendo uso de ese derecho, siempre vamos a condenar la muerte de civiles».
La vocera de Gobierno afirmó que «no es legítimo, aunque provenga del estado de Israel, que haya civiles muertos» y, en relación a las palabras del embajador israelí, «hay una interpretación que no compartimos».
Finalmente, Vallejo aseveró que «la posición de Chile ha sido que frente a ese conflicto se respete la existencia de los pueblos» y que «haya una solución pacífica mediante un acuerdo de paz, no de un conflicto bélico, donde siempre vemos que terminan pagando civiles».