La firma de acuerdos sanitarios del SAG con Turquía , Egipto, México y China ha permitido a Chile incursionar en el mercado del ganado en pie del mundo, recuerda Harry Jurguensen, Gerente de Fegosa.
Chile –asevera- por muchos años no participaba de este negocio y el 2014 tuvo los precios más bajos del mundo en terneros. Espera que nunca más se maten terneros recién nacidos. Felizmente – agrega – hoy podemos vender y con condiciones especiales a Turquía, la cual no es una flor de un día, ya que por razones religiosas necesitan 20 millones de cabezas, para que 70 millones de musulmanes cumplan con un rito o sacrificio anual, es por ello que les interesa el ganado en pie, aseveró Jurguensen.
En relación a posibles convenios o negocios con empresas australianas, Jurgensen recordó que ellos son grandes exportadores de carne y que por lo tanto ahí están los mejores “Trader”, es decir los principales actores del mercado en el mundo.
Jurguensen estima que la alta comercialización incentiva la retención de vientres, y recuerda que al no estar en ese mercado se perdió un millón de cabezas en el transcurso de siete años en Chile, porque el mercado de la carne no es suficiente para darle precio a la crianza- agrega.
Por lo tanto, ahora existe el estímulo para recuperar el patrimonio ganadero en forma paulatina – según Jurgensen – ello, sin ninguna otra intervención del Estado, más allá de permitir la apertura, la homologación y sanidad con los países interesados. Finalmente asevera que el precio es la mejor manera de recuperar la masa ganadera de Chile.
De ésta forma se incentiva la retención de vientres, haciéndose más atractivo y rentable el negocio para que los inversionistas vuelvan a creer en la ganadería- sostiene Harry Jurgensen- ya que hace dos o tres años no lo estuvieron haciendo y por ello la producción de carne tuvo una caída estrepitosa en Chile, afirmó.
