Osorno es reconocido a nivel país por el incombustible amor que la ciudadanía le profesó al conocido perro callejero, Luis Apolo, el cual en sus últimos años de vida, pudo ser acogido por una familia que le entregó cariño y protección, hasta su fallecimiento.
Por lo mismo, el nombre de la clínica veterinaria municipal lleva su nombre, en memoria de todos esos animalitos callejeros que sufren una vida de abandono. Y precisamente, es parte de lo que impulsa una campaña que cuenta con la participación activa de la concejal de Osorno, Cecilia Canales, para aumentar las prestaciones de este recinto médico.
Según indicó la edil, una de las causales más comunes para el abandono de perros y gatos, es la aparición de enfermedades. En el caso de los canes, es la sarna y en los felinos, la conjuntivitis. Precisamente estas afecciones, argumentó Canales, deberían atenderse en la clínica.
La concejal agregó que conversó previamente con el alcalde Emeterio Carrillo sobre esta idea, sin embargo, solo se accedió a informar que desde marzo, la veterinaria municipal hará corte de uñas y posibilidad de eutanasia, pero sin dar espacio aún a la atención del sarna en perros y la conjuntivitis en gatos.
Cecilia Canales puntualizó que seguirán insistiendo en este tema en las instancias pertinentes, uniendo fuerzas con la Unión Comunal de Animalistas de Osorno, aunque están conscientes de que es un tema de largo debate, debido a los gastos en dinero que ello implica.