Se trató de un bus que -proveniente de Barloche en Argentina- efectuaba un recorrido internacional, que tenía destino la ciudad de Puerto Montt, en circunstancias que fue sometido a una fiscalización por parte del Servicio Nacional de Aduana.
Grande fue la sorpresa del personal a cargo del procedimiento cuando descubrieron desde el interior del bus, fueron encontradas cerca de 11 mil 200 cajetillas, que no habían sido debidamente declaradas, por lo que se procedió a su incautación, donde el Administrador de Aduana, Cristian Molina, se refirió a la importancia de este procedimiento.
Según se detalló desde Aduana, se trataba de productos que no contaban con la debida certificación por parte del Instituto de Salud Pública con el fin de vender la mercancía en el sur del país a través del comercio de carácter ilegal.
Cabe mencionar que, todos las cajetillas, posterior a su retiro de circulación, fueron debidamente incinerados por parte del personal servicio público.