De acuerdo con la información recogida por la Encuesta Nacional de Empleo (ENE), que elabora el Instituto Nacional de Estadísticas (INE), los ocupados regionales tuvieron un decrecimiento de 24,0% en doce meses (igual a 99.844 ocupados menos), destacando la variación de los asalariados formales (-19,6%) y trabajadores por cuenta propia (-38,6%).
El aumento de la tasa de desocupación fue producto de la disminución de 23,5% de la fuerza de trabajo en menor proporción a la variación registrada por los ocupados (-24,0%). Por su parte, los desocupados disminuyeron 8,3%, mientras que los inactivos aumentaron en 39,2% (igual a 109.393). Por otra parte, la tasa de participación (45,9%) disminuyó 14,7 pp. en doce meses, al igual que la tasa de ocupación (44,1%) que se contrajo en 14,6 pp.
Los ocupados informales disminuyeron 31,5%, incididos tanto por los hombres (-31,2%) como por las mujeres (-31,9%). En tanto, la tasa de ocupación informal se situó en 24,4%, con un descenso de 2,7 pp., en doce meses.
