Este martes, a menos de dos meses del cambio de mando que permitirá concretar el triunfo en las urnas del Presidente electo, Gabriel Boric, Irina Karamanos despejó la incógnita en torno a sus funciones en el próximo gobierno y anunció que asumirá el rol de Primera Dama el 11 de marzo.
“Después de varias semanas de diseño, hemos decidido asumir el rol tradicionalmente llamado Primera Dama, con el compromiso de reformularlo”, dijo la militante de Convergencia Social al momento de llegar a La Moneda chica, en Condell 249.
De momento, había dudas sobre el cargo que Karamanos asumiría en el próximo periodo presidencial, ya que, desde que apareció como figura pública planteó su idea de repensar el rol de Primera Dama de la República, un cargo que en Chile no tiene atribuciones legales, pero sí injerencia mediante la Dirección Sociocultural de la Presidencia.
Sobre esa idea, durante el anuncio de esta mañana la cientista social detalló algunos de los lineamientos para la reformulación del cargo, el cual “implica adaptarlo a los tiempos”.
“Hay que darle un giro diferente y más contemporáneo a este rol, despersonalizarlo, y esto va a significar cambiar también la relación con el poder y también cambiar la forma en que vemos la relación entre el poder y las mujeres que hacemos política”, explicó, y agregó: “Esto va a implicar también modernización, probidad, y trabajar por una mayor transparencia sobre el ejercicio del poder, abriendo espacios”.
“Me pongo a disposición de este proyecto para trabajar en beneficios de Chile y su diversidad, y esto haciéndolo desde un rol menos caritativo, pero sí más articulador y diplomático para poder usar la tribuna para visibilizar grupos que han sido invisibilizados”, complementó.
“Sin duda, esta propuesta es muy desafiante, pero también hemos visto que lo más fácil hubiera sido no modificar nada, así que nos vamos a poner a trabajar”, aseveró.
Rol en campaña
Tras la segunda vuelta presidencial, una de las personas que comenzó a tener mayor aparición pública desde el círculo cercano del Presidente electo fue Irina Karamanos.
Durante la carrera hacia La Moneda, la militante de Convergencia Social nunca se integró al comando, aunque sí participó activamente en la campaña. Según detalló en su primera entrevista pública, con la Revista Ya, se encargó de tareas como la coordinación del proceso de recolección de firmas para presentar la candidatura de Boric, entre otras.
Sin embargo, luego del 21 de noviembre su visibilidad pública comenzó a notarse más, sobre todo en los eventos a los que asistía junto al abanderado de Apruebo Dignidad.
De cientista social y dirigente feminista a Primera Dama
Karamanos tiene 32 años y los orígenes de sus raíces se trasladan a Grecia, por su familia paterna, y a Alemania, por su lado materno.
Entre 2009 y 2014 se radicó en el país alemán para estudiar ciencias políticas, educación y antropología en la Universidad de Heidelberg. Una vez en Chile, tuvo paso por la Academia de Humanismo Cristiano, donde cursó formación ciudadana y, de manera remota, obtuvo un diploma en diversidad lingüística de la Universidad Autónoma de Barcelona.
En 2016 inició su militancia en el Movimiento Autonomista -donde conoció al diputado por Magallanes-, pero luego de fusiones y autodisolverse, la colectividad pasó a ser en 2019 Convergencia Social. Karamanos, también, es la encargada nacional del frente feminista de la colectividad.
Actualmente, trabaja en la Fundación Procultura, una institución sin fines de lucro que se fundó en 2009 y que busca generar oportunidades de desarrollo en territorios aislados -o con dificultades- que precaricen el bienestar de sus habitantes y su arraigo territorial.
Fuente: La Tercera