Pasadas las 11 de la mañana la sorpresa se instaló en el hemiciclo de la Cámara de Diputados. Contra todos los pronósticos de la oposición el plan activado por Chile Vamos provocó un sismo en el ánimo opositor: Jaime Bellolio (UDI) -la carta de el oficialismo para presidir la instancia- se impuso por dos votos a Iván Flores (DC), el aspirante de la oposición en una votación secreta.
Como Bellolio obtuvo 73 preferencias, versus las 71 obtenidas por Flores, se tuvo que efectuar una segunda vuelta para definir al líder de la testera. La elección fue secreta, por lo que no se supo por quiénes votaron los legisladores.
Finalmente, en este nuevo proceso el diputado Iván Flores se convirtió en el nuevo presidente de la Cámara de Diputados, por 81 votos contra 68.