FOTO. La Tercera. Fausto Torrealba
Mientras Rusia, China, Cuba y otros aplauden acto democrático que se adjudica Maduro, en Venezuela y el mundo se habla de fraude y autogolpe de Estado.
Los venezolanos y el mundo vivieron y observaron el proceso eleccionario donde un largo silencio electoral y sin entregar cifras, finalmente decantó en un triunfo entre gallos y medianoche imponiéndose Nicolás Maduro, para gobernar por seis años más.
El mundo duda, mientras Rusia, China, Cuba y otros le entregan su respaldo a Maduro.
En Chile, parlamentarios como Daniel Lilayú y Héctor Barría le asignan un nombre al que califican de fraude. Un golpe de estado o un autogolpe.
Barría refuerza el concepto de autogolpe y espera que la comunidad internacional este atenta.
Mientras que la abogada venezolana María Auxiliadora Briceño, recuerda lo que han vivido en las últimas cinco elecciones, donde les han robado resultados.
No quiere pecar de ilusa, pero tiene la esperanza que se pueda revertir el proceso, de lo contrario la dictadura seguirá y se ahondará el tema migratorio.
Esta es solo una pequeña muestra de las muchísimas reacciones de toda índole a favor y en contra de una elección que no mostro la transparencia que muchos soñaban.
