Es una compleja situación que se viene arrastrando desde hace tres años. Aunque, al parecer, está teniendo luces de solución, aunque no se avizoran resultados a corto plazo, en la pugna judicial entre el gremio de las manipuladoras de alimentos y la Junaeb.
Durante la tarde de este miércoles, un fallo judicial indicó que las 680 trabajadoras de este rubro de la provincia de Llanquihue, tendrán su esperado pago de finiquitos, pendiente desde 2020, tras el despido de las manipuladoras por parte de la empresa Dipralsa, tras el término anticipado del contrato con la Junaeb. En síntesis, cada una tendrá una indemnización de dos millones cien mil pesos.
La información se sumó, además, al pago bajo embargo de cuentas corrientes, a las manipuladoras de Chiloé.
Todos estos antecedentes encendieron las alarmas en las manipuladoras de la provincia de Osorno, quienes aún no obtienen una respuesta concreta. Incluso, anticiparon que, de no salir humo blanco, paralizarán sus funciones el próximo jueves 20 de abril. Así lo adelantó la secretaria del sindicato, Teresita Maureira.
Un anuncio que preocupa al alcalde de Osorno, Emeterio Carrillo, quien les ofreció su apoyo y además, de oficiar a la Junaeb por un tema que podría afectar a toda su comunidad escolar, en su papel de sostenedores.
Radio Sago se contactó con la directora regional de la Junaeb, Adriana Maldonado, quien indicó que la declaración oficial al respecto, será informada desde el nivel central del servicio, durante la jornada de este jueves.