El ministro de Educación, Raúl Figueroa reiteró la importancia de la presencialidad para este nuevo año escolar, por lo que recalcó que los colegios sí estarán abiertos a partir del primero de marzo para todos aquellos apoderados que decidan enviar a los niños a clases. Sobre esto, mencionó que es una decisión que no le compete a los gremios, sino que a los padres y a la autoridad sanitaria.
«La gente cree que el uno de marzo van a llegar tres millones y medio de escolares a las puertas de las salas de clases, eso no es así. No significa que todo pase el primero de marzo, pero a partir del primero de marzo, el año escolar se inicia, eso significa que dependiendo del territorio donde se encuentre el establecimiento, van a partir las clases, ya sea de forma online si están en cuarentena, ya sea en términos mixtos si están de fase dos en adelante. Esto es paulatino, gradual y voluntario», sostuvo el ministro en EmolTV.
Tal como el ministro lo ha mencionado en otras ocasiones, los colegios estarían preparados para recibir alumnos en una modalidad mixta, pues cada uno de los establecimientos educacionales informó su propio protocolo sanitario: «En enero, el 100% de los colegios entregó su plan de funcionamiento y por lo tanto todos los colegios del país saben cómo cumplir los protocolos sanitarios, cómo adecuarse a ellos y nos han informado a nosotros y a sus comunidades (…) Bajo esa lógica lo que se viene ahora es un sistema esencialmente mixto, la regla general va a hacer un sistema donde se combine la presencialidad con la educación a distancia».
Una de las principales razones por la que los estudiantes debiesen volver a clases, según el ministro es que «los aprendizajes se han deteriorados en todo nivel, la proyección apuntaba a que al menos un 88% de los aprendizajes se pudo haber reducido y eso afecta a los sectores más vulnerables.
Además, en estos casos se incrementa con mucha fuerza el riesgo de deserción escolar, las cifras del año pasado nos daban cuenta que cerca de 87 mil niños podían abandonar el sistema educacional».
A este argumento se agrega que 1.600 establecimientos funcionaron de forma presencial el año pasado, entre jardines infantiles, colegios y liceos sin vacuna y obteniendo resultados positivos: «El impacto que tuvo en términos pedagógicos fue muy positivo y el 85% de los colegios que abrieron no tuvo ningún casos de covid, en el 14% restante hubo un solo caso y fue sin brotes. Los colegios, tomándose las medidas sanitarias no incurren en brotes».
Según el Ministerio de Educación, la autoridad sanitaria ha tomado todas las medidas para que se genere una vuelta a clases, a partir de marzo, de forma exitosa y eficaz. Por lo que Figueroa agradeció el adelanto de la vacunación de los profesores.